La Plaza Roja y el Kremlin: las dos joyas de Moscú

La perla de Rusia siempre fue San Petersburgo. La ciudad más visitada del país, ha eclipsado durante años a la capital. Las expectativas de mi viaje a Moscú, después de haber conocido San Petersburgo, no eran muy altas y fue todo lo contrario. Me encontré con una magnífica ciudad: colorida, limpia, dinámica, restaurada, segura. Y una joya inigualable: la Plaza Roja. El patito feo se ha convertido en un precioso cisne. Por algo ya ha superado a San Petersburgo en número de turistas. Moscú vale la pena y mucho.   

La Plaza Roja y el Kremlin: las dos joyas de Moscú
Museo Nacional de Historia en uno de los extremos de la Plaza Roja

Lejos quedan aquellos enormes edificios feos y anodinos, herencia soviética. Mis padres la visitaron a principios de los 90 y se encontraron con una ciudad gris, sucia y con escasos atractivos turísticos. La crisis que sucedió a la caída de la URSS se palpaba en cualquier rincón.


Han pasado 30 años y hoy Moscú tiene luz propia

La impresionante inversión realizada en Rusia , ha convertido a Moscú en una de las ciudades europeas más atractiva. Restauración de los edificios emblemáticos, bulevares, una nueva zona financiera con rascacielos de diseño, galerías comerciales, tiendas de lujo, museos y actividades culturales. Sorprende lo limpia que está, a pesar de sus 12 millones de habitantes. Las dimensiones son enormes: calles de diez carriles, plazas inmensas (encabezadas por la espectacular Plaza Roja) y gigantescos edificios. Todo es grande en esta ciudad.

La Plaza Roja y el Kremlin: las dos joyas de Moscú
Catedral de San Basilio, Plaza Roja. Moscú
Detalle de la Catedral de San Basilio

Moscú requiere varios días para visitar lo más notable de la ciudad. La Plaza Roja y el Kremlin: las dos joyas de Moscú.

Plaza Roja, una de las joyas de Moscú

Considerada el centro de la ciudad, solamente visitar la Plaza Roja junto al Kremlin y la Catedral de San Patricio, justifica un viaje a Moscú. Con 600 años de historia, es una de las plazas más famosa del mundo. No defrauda. Ni sus dimensiones ni su belleza.

La Plaza Roja y el Kremlin: las dos joyas de Moscú
Perspectiva de la Plaza Roja con los grandes almacenes GUM a la derecha

Este rectángulo de más de siete hectáreas está cargado de historia. Símbolo de la capital rusa y del país, es Patrimonio de la Humanidad desde 1990. Son seis los elementos más notables de la Plaza Roja: el Kremlin, Mausoleo de Lenin, Catedral de San Patricio, Museo Nacional de Historia, los almacenes GUM y la Catedral de Kazán. Recorrer la Plaza Roja es conocer la historia de seis siglos. La zona donde está situada, estaba originariamente poblada por edificios de madera. Fue limpiada por Iván III de Rusia, para evitar el riesgo de incendio.

La Plaza Roja y el Kremlin: las dos joyas de Moscú
Plaza Roja vista desde la Catedral de San Basilio

La nueva plaza sirvió como lugar para los mercados y más tarde para ceremonias públicas e incluso para coronar a los zares. Se tiñó de sangre durante la revolución de 1917 y desde 1990 ya no hay tráfico rodado, a excepción de los desfiles militares.


Son varias las puertas de acceso a la Plaza Roja, pero sin duda la entrada principal y la más bonita para tener una visión general de la plaza, es la Puerta de la Resurrección

La primera vez que se visite, es recomendable entrar por esta puerta. De día luce magnífica y de noche cada uno de los edificios están espléndidamente iluminados. Vas a la Plaza Roja y vuelves, vuelves a pasar una y otra vez. Nunca te cansas de verla, de pasearla. Es un imprescindible en Europa y en el mundo. ¡Por cierto!, y «roja» en ruso no corresponde a un color, sino al adjetivo «bonita».

La Plaza Roja y el Kremlin: las dos joyas de Moscú
Vista del Kremlin con el río Moscova a su paso por la ciudad

Kremlin 

En ruso: Московский Кремль. Significa «fortaleza» y representa el emblema del poder desde la Edad Media. La muralla que rodea el recinto defensivo del Kremlin   es reconocible por sus características almenas y torres. La original, construida en 1156, era simplemente una valla de madera con garitas de guardia. Desde 1990 el conjunto del Kremlin fue incluido, junto con la Plaza Roja, en la lista de  Patrimonio de la Humanidad de Unesco. El recinto amurallado alberga en su interior varias joyas: catedrales ortodoxas, los tesoros de los zares, la Armería, el Campanario de Iván el Grande y la Biblioteca Nacional de Lenin. Aquí también están las dependencias oficiales del presidente, en donde trabaja Putin. Tuvimos suerte: lucía un luminoso (y caluroso) día de junio, en el que destacaban las cúpulas doradas de las catedrales (preciosas por dentro y por fuera). Hay que saborearlas y visitarlas con calma y detenimiento.

La Plaza Roja y el Kremlin: las dos joyas de Moscú
Vista interior del Kremlin en el patio central
La Plaza Roja y el Kremlin: las dos joyas de Moscú
Interior del Kremlin desde los jardines. De izquierda a derecha: la campana del zar (Tsar Kólokol). Detrás la Catedral del Arcángel y a la derecha de la foto la Catedral de la Asunción
Turistas en el patio central del Kremlin frente a la Catedral de la Asunción
La Plaza Roja y el Kremlin: las dos joyas de Moscú
Vista exterior del Kremlin y la llama al soldado desconocido
La Plaza Roja y el Kremlin: las dos joyas de Moscú
Un soldado hace guardia el 22 de junio, día en que se conmemora la invasión de la Unión Soviética por las tropas nazis
Detalle de una de las torres del Kremlin, coronada por una estrella roja

Sólo la visita del Kremlin merece un día de dedicación, si se quieren conocer el interior de todas las catedrales y museos. Muy recomendable comprar las entradas on-line en el siguiente enlace  para evitar quedarse sin visitarlo. Moscú es una ciudad cada año más visitada. A pesar de disponer de entrada on-line, es necesario hacer cola (suele ser rápida) para canjearla en la oficinas de la entrada.

Catedral de San Basilio el Bendito

En el extremo sureste, preside la Catedral de San Basilio (en ruso: Собор Покрова Пресвятой). Como si de un cuento se tratara, sus cúpulas multicolores y retorcidas son realmente atractivas. Es imposible frenar el impulso de hacer una foto detrás de otra. En otro tiempo museo del comunismo, hoy es la imagen icónica del país y la que todos guardamos en la retina cuando pensamos en Rusia. Además de haber sobrevivido a algún que otro incendio, esta construcción se salvó de milagro de ser demolida por Stalin (destruyó todas las iglesias que pudo) al considerarla un estorbo para el desfile de las tropas moscovitas. 

La Plaza Roja y el Kremlin: las dos joyas de Moscú
Fachada principal de la Catedral de San Basilio, fotografiada desde la Plaza Roja

Tras pagar 15€ por la entrada, se accede a esta joya que mandó construir el zar Iván el Terrible en 1554. El motivo de su construcción fue una  promesa que el zar había hecho años antes: levantaría un templo en el centro de Moscú si conseguía conquistar el Kanato de Kazán. La Catedral fue consagrada el 12 de julio de 1561, aunque posteriormente fue ampliada en varias ocasiones.

La Plaza Roja y el Kremlin: las dos joyas de Moscú
Interior de la Catedral de San Basilio

San Basilio está compuesta por nueve capillas independientes, dedicadas a cada uno de los santos en cuyas festividades Iván el Terrible ganó una batalla. El conjunto se unificó al construirse la torre central. Visitando su interior recorres un laberinto de espacios y recovecos, apareciendo en cada nuevo rincón una imagen, un retablo o una pintura. Es la iglesia más original que he visitado nunca.

Detalle del interior de la Catedral de San Basilio

Mausoleo de Lenin

Aquí reposa el cuerpo de Lenin, principal dirigente bolchevique de la Revolución de Octubre en 1917 y creador del régimen comunista soviético. La figura de Lenin fue objeto de un culto semireligioso bajo el régimen soviético: su cuerpo fue embalsamado y expuesto en este mausoleo en la Plaza Roja de Moscú


La ciudad natal de Lenin fue rebautizada en honor suyo como Ulianovsk (su apellido) y la capital en donde desarrolló su lucha política (San Petersburgo o Petrogrado) cambió el nombre por el de Leningrado.

Nombre que la ciudad conservó hasta la disolución de la Unión Soviética en 1991. En un plebiscito recobró el viejo nombre de la época imperial, San PetersburgoEl cerebro de Lenin fue extraído antes de embalsamar su cuerpo, con fines científicos y parece ser que sin llegar a ningún resultado concluyente.

La Plaza Roja y el Kremlin: las dos joyas de Moscú
Mausoleo de Lenin en la Plaza Roja

Aunque había expresado su deseo de ser enterrado en San Petersburgo, junto a la tumba de su madre, fue Stalin quién cambió la ubicación. Impuso al Politburó, su decisión de que el cuerpo de Lenin debía ser embalsamado. Para ello se tuvo que formar un comité de científicos, la «Comisión para la Inmortalización», con el objetivo de encontrar la fórmula adecuada del fluido embalsamador. 


En la Plaza Roja se edificó en 1924 el Mausoleo de Lenin, junto a los muros del Kremlin, donde reposan sus restos mortales embalsamados

Allí ha permanecido la momia desde el 1 de agosto de 1924, a excepción de 1360 días durante la II Guerra Mundial, cuando fue evacuado a Siberia. En nuestro viaje a Moscú, el Mausoleo de Lenin estaba cerrado al público.

GUM 

En ruso ГУМ, son unos grandes almacenes construidos a finales de la época imperial, y que continuaron durante la Unión Soviética y posteriormente en Rusia. El edificio principal de GUM en Moscú cuenta con una fachada de 242 metros, construidos entre 1890 y 1893. Su arquitectura trapezoidal combina elementos de arquitectura medieval rusa, además de utilizar una estructura de acero y techo de vidrio. El edificio ocupa casi todo un lateral de la Plaza Roja, sus dimensiones impresionan y su equilibrio arquitectónico también. 

La Plaza Roja y el Kremlin: las dos joyas de Moscú
Fachada exterior de los grandes almacenes GUM en la Plaza Roja

En la época soviética se denominaban «Principales tiendas universales del Estado». En los años previos a la Revolución Rusa en el edificio operaban cerca de 1.200 tiendas como centro comercial. Con posterioridad GUM fue nacionalizado y continuó sirviendo como tienda hasta que Stalin lo destinó a albergar oficinas. En 1953 el Estado Soviético reemprendió su utilización como grandes almacenes y dándole el nombre GUM, destacándose en esa época como un lugar muy surtido y variado. Al disolverse la Unión Soviética, el GUM fue privatizado. Hoy en día alberga marcas de lujo, tiendas y restaurantes al más puro estilo capitalista. Por la noche se ilumina con miles de bombillas añadiendo su encanto a la bella Plaza Roja nocturna.

Vista de los almacenes GUM e iluminación nocturna

Museo Nacional de Historia

En ruso Государственный Исторический музей. En la Plaza del Manège y antes de  acceder a la Plaza Roja, te encuentras con este magnífico edificio de ladrillo rojo del siglo XVII. Su catálogo recoge infinidad de elementos. Desde reliquias de tribus prehistóricas que ocupaban el territorio de la actual Rusia, hasta obras de arte de valor incalculable adquiridas por la dinastía Románov. El número total de objetos en la colección del museo se calcula por millones.

La Plaza Roja y el Kremlin: las dos joyas de Moscú
Museo Nacional de Historia, Moscú

Catedral de Kazán

En ruso: Казанский собор. Esta iglesia ortodoxa rusa, ubicada en la esquina noreste de la Plaza Roja, ha tenido una historia accidentada desde su construcción original en madera del año 1625. Incendiada, destruida y reconstruida, hoy luce preciosa de día y de noche. Fue considerada una de las iglesias más importantes de Moscú. En 1936, cuando la Plaza Roja se preparaba para los desfiles militares de la Unión Soviética, Stalin ordenó que se retiraran las iglesias de toda la plaza. Consiguieron salvar la Catedral de San Basilio, ¡qué pérdida si la hubieran demolido!. La Catedral de Kazán no corrió la misma suerte y fue destruida. Posteriormente fue sustituida por un edificio de oficinas y una cafetería.  

Vista nocturna de la Catedral de Kazán, Moscú

Después de la caída de la Unión Soviética, la Catedral de Kazán fue la primera iglesia que se reconstruyó por completo entre 1990 y 1993. Su reconstrucción se basó en fotografías y datos detallados de la iglesia original. El icono de la Virgen de Kazán en su interior, es una copia de la original, ubicada en la Catedral de la Epifanía de Moscú.

La Plaza Roja y el Kremlin: las dos joyas de Moscú
Entrada principal a la Catedral de Kazán en la Plaza Roja

Guía Práctica

La oferta en Moscú tanto de ámbito cultural como lúdico, es amplia. Éstas son algunas reseñas interesantes, experimentadas por la autora:

  1. PENTAHOTEL MOSCOW ARBAT, Ulitsa Novyy Arbat, Moscú. Ubicado en la céntrica calle Nueva Arbat, a sólo 550 metros de la estación de metro Arbatskaya y a pocas paradas de autobús de la Plaza Roja. Este moderno hotel es una excelente opción de alojamiento en la ciudad. Ubicado en varias plantas de un elevado edificio, sus habitaciones limpias, insonorizadas y modernas son francamente cómodas. La buena relación calidad-precio, la ubicación y decoración son algunos de sus puntos fuertes. El personal es joven, amable y resolutivo. Y hablan inglés.
Exterior del Hotel Pentahotel Arbat, iluminado de noche en la animada calle Nueva Arbat
Vista desde la ventana de la habitación en la planta novena, en el Pentahotel Arbat. Son las 3.30 de la madrugada y las noches de junio son así de bonitas

2. RESTAURANTE WHITE RABBIT, 3 Smolenskaya square, 16th floor, Moscow.  Cocina rusa en un entorno bonito y moderno. El restaurante de moda en Moscú y recientemente premiado como el 13º mejor restaurante del mundo. Además de su entorno y gastronomía, tiene unas espectaculares vistas del magnífico edificio del Ministerio de Asuntos Exteriores. Sólo por las vista vale la pena ir a tomar un cóctel o aperitivo, más asequible que almorzar o cenar. Se ubica en la planta 16 de un moderno edificio, con un centro comercial de lujo en las plantas inferiores.

Interior del restaurante White Rabbit

3. Hasta 42 actividades y excursiones en Moscú, ofrece la empresa CIVITATIS . Todo en español. Además de la excursión «Free Tour», un clásico de las ciudades europeas, cabe destacar las siguientes excursiones:

  • Visita guiada por el Kremlin (2h/45€): El Kremlin se puede visitar por tu cuenta, comprando las entradas on-line o en las oficinas y se puede recorrer y visitar a tu ritmo. Otra opción es contratar esta visita guiada para conocer el recinto amurallado. 
  • Espectáculo Kostroma del Ballet Nacional Ruso (2h/ a partir de 35€): alegoría del pueblo ruso y su historia a cargo del Ballet Nacional.
Espectáculo Kostroma del Ballet Nacional Ruso
  • Visita guiada por el metro de Moscú (2h/15€): interesante visita por las estaciones más míticas del metro de Moscú, algunas parecen auténticos palacios. 
  • Tour nocturno por el Moscú iluminado (2,5h/35€): con paradas para fotografiar y en microbús climatizado, se realiza esta excursión por los monumentos iluminados más significativos de la ciudad. La Moscú nocturna vale realmente la pena.
Paseo en barco por el río Moscova
  • Paseo en barco por el río Moscova: navegar por el río Moscova entre abril y septiembre (la climatología no lo permite el resto del año), es uno de los imperdibles de esta ciudad. Hay varias compañías de barcos y diferentes rutas, variando el precio según se elija. Una buena opción es embarcar al lado de la Catedral de Cristo Salvador. Esta ruta permite observar el Kremlin desde el río y otros bonitos edificios, llegando hasta el Parque Zaryadye.

Enlaces de interés 

https://www.rusia.travel/

https://www.kreml.ru/en-Us/visit-to-kremlin/ticket-prices/stoimost-vkhodnykh-biletov/

https://www.rusalia.com/

Autor entrada: Beatriz Lagos

Soy Bea. Me encanta viajar y fotografiar. Viajo desde siempre y siempre que puedo . Conocer , experimentar y rodar por el mundo.

4 comentarios en “La Plaza Roja y el Kremlin: las dos joyas de Moscú

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *