El aislamiento ha sido la característica principal de este archipiélago en medio del Atlántico. Su espacio aéreo fue restringido a vuelos comerciales hasta el 2015 y a partir de entonces empezó el turismo en las islas. São Miguel es la isla más grande de las nueve y la más poblada del archipiélago, cuya capital es Ponta Delgada. Te invito a conocer la isla de São Miguel en Azores un paraíso en el Atlántico en una ruta de 4 días recorriendo la isla en coche.
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¿Dónde se encuentran las Azores?
Las Azores, famosas por dar nombre a un anticiclón que determina buena parte del clima europeo, son mucho mas que nueve puntos en medio del atlántico. Este archipiélago formado por un grupo de nueve islas portuguesas, cada una con su personalidad, si algo lo define es naturaleza. Desde paisajes volcánicos, lagunas impresionantes y una biodiversidad única; es el destino ideal para quienes buscan una experiencia de naturaleza pura. Además, sorprendentemente, Azores todavía no recibe excesivos turistas.
Las Azores, al igual que Canarias y Madeira son de origen volcánico y junto a Cabo Verde componen la llamada Macaronesia. Las Azores se encuentran entre la placa africana, euroasiática y norteamericana. El punto mas cercano de América es la isla de Terranova en Canadá con una distancia de aproximadamente unos 2.225 kilómetros. Se encuentra a unos 1.500 km del Cabo da Roca, situado en el distrito de Lisboa y es el punto más occidental de la Europa continental.
La isla de São Miguel en Azores un paraíso en el Atlántico forma parte del archipiélago y comparte latitud con Sevilla. Azores obsequia a Portugal con su pico más alto: el volcán de la isla de Pico con 2.351 metros de altura. Está rodeado de un mar infinito y espectacular, un elemento clave de la identidad, economía y estilo de vida de las Azores.
Breve historia de las Azores
Fueron descubiertas por exploradores portugueses en el siglo XV, alrededor de 1427. Se registraron oficialmente bajo la corona de Portugal y comenzaron a ser colonizadas principalmente por portugueses quienes trajeron técnicas agrícolas y establecieron comunidades en varias islas empezando por São Miguel y Santa Maria, las mas próximas a la costa portuguesa continental.
Como puedes imaginarte, las Azores se convirtieron en un punto estratégico para las rutas marítimas entre Europa, Africa y América. Debido a su ubicación, fueron una escala clave para flotas de exploración, comercio y transporte de riquezas, lo que trajo ataques de corsarios y piratas ingleses y franceses. En el XIX las Azores obtuvieron un cierto grado de autonomía y en el siglo XX, el archipiélago fue una importante base en la Segunda Guerra Mundial y en la Guerra Fría, especialmente para la aviación y la marina estadounidense. A partir de 1974 con la Revolución de los Claveles, Portugal concedió autonomía política a las Azores con un gobierno regional propio. Hoy son una Región Autónoma de Portugal.
Isla de São Miguel en Azores un paraíso en el Atlántico
El archipiélago de las Azores en su conjunto no tiene desperdicio porque todas ellas ofrecen algo atractivo. Si dispones de poco tiempo, vale la pena centrarse en recorrer la isla de São Miguel en 3-4 días y dejar para otro viaje (seguro que vuelves) la visita de otras islas. São Miguel es algo mayor que la isla de Menorca y es conveniente recorrerla en vehículo, lo que permite llegar a cualquier rincón de la isla.
La capital de São Miguel: Ponta Delgada
Tras un vuelo de tres horas y cuarenta minutos con SATA desde Barcelona, la compañía aérea de las Azores y una de las más antiguas de Europa, aterrizamos en Ponta Delgada. São Miguel nos recibe en una tarde soleada de septiembre. Dejamos las maletas en el hotel do Colegio y salimos a descubrir la ciudad más grande del archipiélago y capital administrativa de las Azores. Con una población del casi 70.000 habitantes, esta tranquila ciudad se fundó en el siglo XV por colonos portugueses.
Nos acercamos al puerto, Porto de Ponta Delgada, el principal puerto marítimo de las Azores y uno de los centros logísticos más importantes del archipiélago que también recibe cruceros internacionales. La pesca es la actividad económica tradicional en las Azores y aquí se encuentra la flota pesquera. El atún es esencial para el consumo local y la exportación.
El sol se va poniendo y aprovechamos los últimos rayos en una tranquila terraza del puerto. Aquí se respira calma, sin gente ni agobios. ¡Qué buena primera impresión!
Al día siguiente, en nuestro primer día completo en Ponta Delgada descubriremos más sobre la ciudad y haremos una salida al mar para ver cetáceos. No te pierdas los Free Tours de Teresa de VoyAzores.com , además de divertirte, aprendes un montón.
¿Qué ver en Ponta Delgada?
- Puertas de la Ciudad (Portas da Cidade): emblemáticas puertas de estilo barroco del siglo XVIII. Son el símbolo de la ciudad
- La Iglesia Matriz de Ponta Delgada (Igreja Matriz de São Sebastião) construida entre 1531 y 1547, se la conoce como la «matriz» ubicada en la preciosa y animada plaza Largo da Matriz, este es el corazón de la ciudad
- Mercado de Graça, el principal mercado de la ciudad donde encontrarás productos típicos como la «alanas» de São Miguel
- Forte de são Brás, (Fuerte de San Blas) una fortaleza construida en el siglo XVI que protegía a ka ciudad de los ataques piratas
- Museo Carlos Machado, se ubica en un antiguo convento y ofrece exposiciones de arte e historia. Uno de los museos más importante del archipiélago.
- Visita a una plantación de piñas. La piña de São Miguel («ananas») es famosa en Portugal y se cultiva en invernaderos especiales. Nosotros visitamos la Plantação de Ananas dos Açores una de las actividades interesantes que hacer en la isla de São Miguel en Azores un paraíso en el Atlántico. Podrás degustar diferentes productos a base de ananas
Avistamiento de cetáceos
Ponta Delgada es uno de los mejores lugares para el avistamiento de cetáceos en Europa. Siendo las aguas de las Azores un punto de paso para muchos de ellos, merece la pena hacer una salida en barco y disfrutar de la excursión. Ballenas, delfines y cachalotes nos esperan para nuestro deleite. En esta excursión nosotros optamos por Futurismo Azores Adventures, una empresa que respeta las reglas de sostenibilidad y protección de los animales y son biólogos marinos los que guían en el avistamiento. Se pueden realizar en zodiac o catamarán por unos 65€/persona.
Poco después de salir del puerto nos visitaron varios delfines que jugaban a nuestro alrededor. Tardamos más en ver ballenas y cachalotes, pero ¡lo conseguimos! Las aguas profundas del Atlántico alrededor de las Azores son ideales para estos últimos y residen aquí de forma permanente.
En Azores existe una tradición histórica de caza de ballenas que fue practicada hasta los años 80, cuando se transformó en una industria de avistamiento de ballenas más sostenible y respetuosa. Los avistadores de ballenas se sitúan a lo largo de la costa y están en continua comunicación con los barcos que realizan los avistamientos para localizar a los cetáceos.
Sete Cidades y el Oeste de São Miguel
Iniciamos nuestro recorrido en coche por el oeste de la isla; con impresionantes paisajes volcánicos, lagunas y rica vegetación, y lo hacemos en compañía de Jorge que se encargará de llevarnos a los rincones más bonitos y espectaculares de São Miguel. Arrancamos la jornada en Ponta da Ferraria, un lugar especial en donde se mezcla el agua termal caliente con el océano, creando una experiencia única de baño en el mar gracias a la actividad volcánica subterránea. El lugar cuenta con instalaciones termales.
La siguiente parada es uno de los «must» de la isla, Sete Cidades, pero empieza a llover y no paramos en el Mirador da Boca do Inferno que ofrece una panorámica magnifica de la Lagoa das Sete Cidades. Se halla dentro de una caldera volcánica y se considera uno de los paisajes más hermosos de las Azores. Está formado por dos lagos, el Lago Verde y el Lago Azul, ubicados en el cráter del volcán extinguido. La leyenda cuenta que el color de los lagos proviene de las lágrimas de dos amantes separados, uno con ojos verdes y otro con ojos azules. Tenemos suerte y las nubes nos dan una pequeña tregua para poder divisar este lugar impresionante.
El hotel abandonado más famoso del archipiélago se ubica justo enfrente del Mirador de Vista do Rei. Se trata del Monte Palace, un edificio inaugurado en 1989 como hotel de lujo en un ambicioso proyecto turístico, que apenas duró un par de años en funcionamiento. Desde su cierre quedó abandonado y expoliado hasta hoy. El hotel se encuentra en ruinas, con interiores deteriorados y cubiertos de grafitis pero se ha convertido en una especie de icono local. A pesar de que el acceso no es oficialmente permitido, los turistas se cuelan para deambular por su interior. Desde la azotea las vistas son impresionantes.
Actualmente es propiedad de los chinos y hay rumores de un proyecto para rehabilitar el hotel y devolverle su brillo inicial. Mientras, sigue siendo un símbolo de los sueños y desafíos del turismo en las Azores.
La carretera que nos lleva hasta nuestro próximo punto está cuajada de hortensias. Soy una fan de esta flor que inunda con sus colores los paisajes de São Miguel. Florecen entre los meses de mayo y junio, anunciando la llegada del verano y convirtiéndose en todo un símbolo que otorga al archipiélago un valor añadido. Son preciosas.
Seguimos en el Valle de Sete Cidades y paramos frente a la iglesia de São Nicolau, muy coqueta, de estilo colonial antiguo y construida con piedra negra volcánica sobre paredes blancas, como la mayoría en la isla.
Seguimos ruta hasta Mosteiros conocido por sus formaciones rocosas volcánicas en el mar y sus piscinas naturales. Cruzamos los pueblos marineros de Capelas y Rabo de Peixe, éste último famoso por una reciente serie en Netflix que relata un hecho real cuando un barco, cargado hasta las trancas de cocaína, se hundió frente al pueblo. Llegamos a Ribeira Grande, una de las principales ciudades de São Miguel.
Furnas y el Sureste de São Miguel
El Sureste de São Miguel es una región de contrastes naturales. Una zona volcánica muy activa localizada en Furnas, con aguas termales, géiseres y paisajes que parecen de otro planeta. «Hoy vais a conocer cómo se prepara el famoso cocido azoriano», nos comenta Jorge, ya preparado para nuestra segunda ruta por São Miguel. La primera parada es el Lago de Furnas y nos acompaña un precioso y soleado día de septiembre.
En realidad, el lago de Furnas es uno de los tres grandes lagos volcánicos de São Miguel. Disfruté con tranquilidad y sin apenas gente de este delicioso lugar. A orillas del lago, se encuentran las calderas donde se cocina el famoso «cocido das Furnas», un estofado tradicional cocido con el calor geotérmico bajo tierra.
Hacia las 10.30 unos hombres sacaban de bajo tierra una gran olla con el cocido que, desde el día anterior, se había estado cocinando. Cada restaurante tiene alquilado el espacio y «el agujero» convenientemente identificado en donde cocinar su cocido y que después será servido en los restaurantes de Furnas.
Llegamos a la población de Furnas «fumarolas», una de las joyas naturales de São Miguel. Esta villa balnearia es una zona volcánica muy activa y famosa por sus manantiales termales, pozos de barro hirviendo entre gases sulfurosos. Furnas cuenta con un microclima benigno y aquí instaló su residencia un cónsul norteamericano en el siglo XVIII que dio origen al actual jardín botánico Terra Nostra que ya tiene más de 200 años.
Me impresionó Terra Nostra, un paraíso de helechos arborescentes, criptomerias, rododendros, azaleas y un sinfín de vegetación y estanques. Hay que pagar entrada, a excepción de los clientes del hotel ubicado dentro del jardín botánico que acceden libremente a partir de las cinco de la tarde cuando se vacía de visitantes.
Su piscina termal de color marrón, contiene aguas ricas en hierro y minerales en donde te puedes bañar a casi 40 grados de temperatura. En definitiva, Furnas es un lugar especial.
Por supuesto degustamos el famoso «cozido» en el restaurante Vale das Furnas. Carne, verduras y legumbres cocinados en tierra caliente durante horas.
Después de este copioso almuerzo seguimos ruta por la isla de São Miguel en Azores un paraíso en el Atlántico en dirección hacia Vila Franca do Campo, una localidad pesquera fundada en el siglo XV. A cuatro kilómetros, en una colina sobre la ciudad, destaca la sorprendente escalinata de la capilla de Nuestra Señora de la Paz, un excelente mirador desde donde poder observar la villa y la costa sur de la isla.
La marina de Vila Franca es el punto de partida de los ferries que llevan al famoso islote de Vila Franca, una de las atracciones locales turísticas de la isla en cuyo cráter hay una gran piscina natural, un paraíso para el snorkel y un lugar cada vez más demandado. Vila Franca do Campo también es conocida por sus “queijadas da Vila”, un delicioso postre local que se puede degustar en panaderías y quioscos y que está francamente rico.
Plantaciones de té y Nordeste de São Miguel
Abordamos nuestro tercer día recorriendo São Miguel y hoy nos dirigimos al nordeste de la isla. El clima en Azores es muy cambiante e imprevisible. Hoy toca lluvia pero da igual, el lugar al que nos dirigimos es uno de los imprescindibles de la isla: Parque da Ribeira dos Caldeirões, un área protegida localizada a lo largo del curso del río Guilherme.
Te quedas impresionado observando la abundante flora macaronesia, y adentrándote en el bosque de Laurisilva. Un ecosistema característico también del archipiélago de Madeira y de las islas Canarias que se formó hace 20 millones de años en la Época Terciaria. Helechos arbóreos, impresionantes macizos de hortensias y criptomerias enormes. El Parque Natural de Ribeira dos Caldeirões nació de un proyecto paisajístico para aprovechar las cascadas y los molinos, creando una zona de esparcimiento en medio de la belleza de natural de este rincón de São Miguel.
La cascada del parque es una de las principales atracciones, situada justo a la entrada, es un impresionante salto de agua que cae en medio de una densa vegetación entre hortensias.
Nos despedimos de este idílico lugar y nos dirigimos hacia la costa. Encontramos el sol en el Miradouro da Ponta do Sossego un lugar propicio para tus fotos de redes sociales con preciosos senderos que rodean el mar.
Llegamos al extremo noreste de la isla de São Miguel en donde se ubica el Farol do Arnel, el más antiguo de las Azores. Esta construcción privada tiene una ubicación privilegiada con vistas al inmenso océano y lleva en funcionamiento desde 1876, ejerciendo hasta hoy su actividad de control costero.
Sin duda, este recorrido por el nordeste de São Miguel esta resultando muy atractivo. ¿Sabías que en esta isla existen plantaciones de té? Ciertamente, la llegada del té a nuestro continente, en el siglo XVII, fue de la mano de los portugueses y no de los ingleses como es conocido. Dicen que las Azores han reinado silenciosamente como la capital secreta del té en Europa en las laderas de la costa norte de la isla. La producción de té se convirtió en una industria destacada en la isla, alcanzando su apogeo en la década de 1950.
En 1966, solo 5 de las 14 fábricas originales de procesamiento de té permanecían en funcionamiento. Actualmente, solo hay dos: la Fábrica de Té de Porto Formoso, que cerró en la década de 1980 y reabrió sus puertas en 2001 y la Fábrica de Té de Gorreana, que ha permanecido abierta ininterrumpidamente desde 1883. Visitamos esta última y resultó muy interesante, aún más como bebedora de té que soy.
Gorreana es una empresa familiar desde 1883 que produce una variedad de tés verdes y negros 100% orgánicos e infusiones de té. Las instalaciones están ubicadas en una loma montañosa inclinada en el lado norte de la isla, con vistas al océano Atlántico. Un lugar idílico. Como dato curioso, las plagas comunes de las plantas de té no sobreviven al clima húmedo de São Miguel por lo que no es necesario utilizar insecticidas químicos en su plantación. Dejamos el té y seguimos recorrido por la isla de São Miguel en Azores un paraíso en el Atlántico. Paramos en el Mirador de Santa Iria, no me canso de observar y fotografiar el magnifico e inmenso océano Atlántico.
Seguimos ruta y Jorge nos sorprende con un rincón espectacular, el Salto do Cabrito, una de las maravillas naturales de la isla. Un espectacular salto de agua de 40 metros de altura que forma una piscina que invita al baño. Para llegar desde Ribeira Grande, hay que ir por el Caminho da Tondela y la carretera EN5-2A. Son 4,8 kilómetros de distancia, unos 12 minutos. Estábamos prácticamente solos hacia las cuatro de la tarde.
Rematamos la jornada con uno de los lugares que mas nos han gustado de la isla, la Caldeira Velha, un parque natural con pozas termales y vegetación selvática que parece de otro planeta. Es necesario reservar entrada previamente y te asignan una franja horaria que permite distribuir el numero de visitantes. Tuvimos suerte y no encontramos demasiado público a las cuatro y media de la tarde. Cierto es que al salir entraba mucha mas gente.
Este sorprendente tesoro natural te permite disfrutar de pozas termales a diferentes temperaturas envuelta en naturaleza virgen. Hay instalaciones preparadas para cambiarte y guardar tus pertenencias. Resérvate al menos dos horas para disfrutar de esta maravilla.
La Caldeira Velha se encuentra en la ladera del Volcán Água de Pau, uno de los tres volcanes cuya erupción provocó la génesis de la isla y en cuyo cráter, debido a las constantes lluvias, se ha formado uno de los lagos más famosos en São Miguel, el Lagoa do Fogo. Hacia allí nos dirigimos para concluir esta impresionante jornada.
La Lagoa do Fogo es una de las lagunas de mayor tamaño del archipiélago de las Azores y en el caso de la isla de São Miguel es la segunda mas grande después de la de Sete Cidades. Situada en el interior de São Miguel y cerca de Vilafranca do Campo, la Lagoa do Fogo está protegida desde 1974 como reserva natural. Si el tiempo y la niebla lo permiten, la vista de la lagoa desde los miradores de la carretera es maravillosa. Una vez más, tuvimos suerte y la panorámica que disfrutamos fue inolvidable.
Camino de Ponta Delgada, nos despedimos de este día increíble con una bonita puesta de sol. Gracias a Jorge y Teresa de VoyAzores.com por descubrirnos este paraíso en el Atlántico, tan maravilloso como todavía desconocido. Prometemos volver a visitar el resto de islas del archipiélago porque vuelves enamorada de Azores.
Información práctica de São Miguel
- SATA dispone de vuelos directos desde España (Madrid y Barcelona) y Portugal (Lisboa y Oporto) a su capital, Ponta Delgada el aeropuerto internacional de las islas. IBERIA vuela desde Madrid. Para moverte entre las islas se utiliza el avión y para recorrer São Miguel la mejor opción es un coche de alquiler.
- Las Azores tienen un clima moderado, en invierno la temperatura es suave. Hay que ir preparado porque el tiempo puede cambiar varias veces en el mismo día.
- Las islas cuentan con caminos aptos para el senderismo. Encontrarás información en la web de Turismo de Azores www.visitazores.com
- Septiembre es un buen mes para ir. Ya no hay tanto turismo, los precios son más asequibles y el tiempo es bueno.
- ¿Dónde comer en Ponta Delgada? En Suplexio encontrarás unas hamburguesas caseras buenísimas, incluso veganas. Descubrirás buena comida japonesa en Otaka y Haibu, el restaurante del Hotel Do Colegio. A Tasca es un lugar muy famoso pero es difícil encontrar mesa. En La Gelateria encontrarás el mejor helado de la ciudad. Para los amantes del atún, Ponta Delgada es una formidable opción.
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¡Azores es un paraíso, no te lo pierdas!