Bellezas naturales, ciudades con carácter, rincones originales, templos que son joyas, geografias prodigiosas. Viajar te permite acceder a lugares excepcionales que te hacen soñar y vivir experiencias irrepetibles, como la piscina infinita más alta del mundo.
La República de Singapur es una ciudad-estado ubicada en el extremo de la península de Malasia. Con sólo 697 km cuadrados, es el país más pequeño del Sudeste Asiático. Con poco más de 5 millones de habitantes, sólo ha necesitado 200 años para convertirse en una de las principales ciudades globales y uno de los centros neurálgicos del comercio mundial, con el segundo puerto más dinámico del mundo y con el tercer mayor centro financiero del globo. Los analistas económicos la consideran la tercera mayor renta per capita del mundo con un elevado nivel de competitividad económica. En resumen, el país donde más ha aumentado la riqueza en el último siglo.
Nada más aterrizar en Singapur percibes que es diferente al resto del Sudeste Asiático. Desde su impresionante aeropuerto, hasta la llegada a la ciudad , en nuestro caso, saliendo de una parada de metro en el mismísimo corazón financiero. Hay mucho que ver y disfrutar en Singapur y no necesariamente los lujosos centros comerciales y magníficos edificios de la ciudad. Chinatown y Little India recuerdan que estás en cualquier rincón de Asia.
Un baño a 200 metros de altura con unas vistas espectaculares del skyline de una de las ciudades más atractivas del Sudeste Asiático, es una experiencia única. El Hotel Marina Bay Sands, cuya espectacular y original construcción se divisa desde cualquier ángulo de la ciudad, construyó en su parte más elevada un barco-terraza con una piscina infinita de 150 metros de largo. Sólo puedes disfrutar de ella si te hospedas en el hotel. Recomiendo la experiencia.
El clima del Sudeste Asiático no siempre acompaña, pero no importa. Bañarse en la piscina infinita más alta del mundo, vale la pena incluso con nubes y lloviendo. A cualquier hora, mañana, tarde o noche . El lugar es único y la sensación especial. Y tan atractivo resulta observar las torres urbanas que conforman el skyline de Singapur, como a los bañistas: nadando de aquí para allá, utilizando su palo selfie y sus móviles con protecciones varias contra el agua. Todos buscan el mejor ángulo para su instantáneas.
Cuando cae la noche nos espera uno de los mayores atractivos de la ciudad: el espectáculo de luz y sonido en Gardens by the Bay
Gardens by de Bay ubicado enfrente del Hotel Marina Bay Sands, son unos espectaculares jardines levantados en tierra ganada al mar. Una maravilla técnica que durante el día el sol carga de energía a unas estructuras denominadas los «supertrees», que de noche se iluminan en un brutal espectáculo de luz y sonido.