Fui a Gokoku-ji pensando que era Gotoku-ji (sí, el templo del maneki-neko)… y no, no era. Bueno, viajeros, vengo a confesar algo que probablemente le ha pasado a más de uno visitando Tokio: me equivoqué de templo. En mi defensa puedo decir que los nombres son muy parecidos. ¿Gokoku-ji...








