Passeig de Gràcia el gran bulevar de Barcelona

He leído una frase recientemente que me ha hecho reflexionar: «No sé que tiene Barcelona, pero siempre que viajo por el mundo, aunque sean lugares increíbles, ninguno la supera». Más allá del amor que siento por mi ciudad, cierto es que hay elementos que la hacen única, como Passeig de Gràcia el gran bulevar de Barcelona.

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Sobre el Passeig de Gràcia

La burguesía barcelonesa de finales del XIX y principios del XX, está íntimamente ligada al Modernismo. El Plan Cerdà (1859) consiguió edificar y establecer vías de comunicación entre Barcelona y los pueblos cercanos, ampliando calles y avenidas. Así se creó el Eixample, que se convirtió en el centro de residencia de la burguesía ilustrada, con alto poder adquisitivo e intereses culturales.

El Paseo de Gracia (en catalán Passeig de Gràcia) se consolidó a principios del XX, como el principal centro residencial de la burguesía, con la aportación creativa de los arquitectos modernistas Gaudí, Puig i Cadafalch, Domènech i Montaner y otros. Una gran avenida que unía la Plaça Catalunya, epicentro de la ciudad con la Vila de Gràcia

En las grandes ciudades europeas siempre identificamos un bulevar ancho y arbolado con majestuosos edificios y las mejores tiendas y cafés. Así nos viene a la mente la famosa avenida de los Champs–Élysées en París, la Avenida Perspectiva Nevski en San Petersburgo o el Ring de Viena.

Passeig de Gràcia es el gran bulevar de Barcelona. Con alrededor de 1.300 metros de longitud y poco más de 40 de anchura, acumula algunas de las mejores Joyas Modernistas de la ciudad que describo en detalle aquí.

Hoteles y tiendas de lujo, cafés y terrazas le proporciona un aire similar al de los Champs-Élysées. Sedes de empresas importantes o instituciones (la Bolsa de Barcelona, por ejemplo)

Sin embargo, los elegantes burgueses que se paseaban orgullosos hace más de 100 años, han dado paso a ingentes grupos de turistas que atiborran las entradas a los edificios modernistas y disfrutan de las tapas y compras. Esta es la calle por excelencia de los barceloneses para pasear.

Plaça de Mossèn Jacint Verdaguer, intersección Diagonal-Passeig de Gràcia

Numeración del Passeig de Gràcia

En realidad, el Ensanche (Eixample) es un cuadrado perfecto definido por largas avenidas que van desde la montaña al mar y calles transversales que las cruzan. Lls barceloneses para ubicar un punto en el Eixample suelen reseñar dichas intersecciones. En general, para orientarnos no solemos decir el número exacto del inmueble de Passeig de Gràcia. Por ejemplo Passeig de Gràcia, 74 que corresponde a una joyería de lujo, decimos «Passeig de Gràcia entre carrer Mallorca i València».

Debido a que Barcelona está situada entre el mar y la montaña y delimitada por los ríos Llobregat (sureste) y Besós (noreste), cuando queremos referirnos a una esquina achaflanada concreta de las cuatro que hay en cada intersección del Eixample, decimos por ejemplo «lado mar-Besos» o «lado montaña-Llobregat». De esta manera te sitúas rápidamente sin conocer el número exacto de una calle del Eixample.

Asimismo, la numeración de esta gran avenida, se inicia en la Plaça Catalunya. La dirección Passeig de Gràcia,1 corresponde a la AppleStore que ocupa una de las esquinas más transitadas de la ciudad. Amancio Ortega adquirió este histórico inmueble (antigua sede del Banesto) por 80 millones de euros (Fuente, El economista.es/2012). Parte del edificio lo alquiló a la cadena de hoteles Iberostar.

TIP Viajero: las mejores vistas de la famosa Plaça Catalunya se ven desde la terraza del hotel Iberostar Selection Paseo de Gracia en su último piso. Aunque no seas cliente del hotel, se puede acceder a la terraza y tomar una consumición junto a la piscina disfrutando de unas maravillosas vistas.

Plaça Catalunya con el antiguo edificio Banesto

Con todo esto, en el extremo opuesto del Passeig de Gràcia abandonamos el Eixample y entramos en el Distrito de Gràcia, la Avinguda Diagonal hace de frontera entre ambos barrios. Cruzando la Diagonal llegamos a los “Jardins de Salvador Espriu”, conocidos desde siempre como “Els Jardinets de Gràcia”.

Antes de que se estreche Passeig de Gràcia para convertirse en Carrer Gran de Gràcia, encontramos el último número de la avenida que también corresponde a un notable edificio: Casa Fuster, obra del famoso arquitecto catalán Lluís Domènech i Montaner

Construido entre 1908 y 1910, Casa Fuster fue un regalo de Mariano Fuster (un rico mallorquín) a su esposa y está considerado uno de los edificios más costosos de la ciudad. De estilo neogótico y modernista, fue la obra póstuma del arquitecto en Barcelona.

TIP Viajero: Actualmente la Casa Fuster aloja uno de los hoteles más lujoso de la ciudad: Hotel Casa Fuster, inaugurado en 2004. En la planta baja se encuentra el precioso Café Vienes, un lugar histórico de tertulias intelectuales con una decoración magnífica. También hay concierto de jazz. Woody Allen ha tocado aquí. Uno de mis rincones favoritos de Barcelona.

Imprescindibles en el Passeig de Gràcia

Claro está, que el recorrido puede ir desde Plaça Catalunya hasta la Diagonal o viceversa. Es interesante ir alternando visitas culturales de emblemáticos edificios modernistas, con compras en las innumerables tiendas distribuidas a lo largo de la avenida.

Ruta del Modernisme

La Ruta del Modernismo de Barcelona es un itinerario por la Barcelona de Gaudí, Domènech i Montaner y Puig i Cadafalch, que junto a otros arquitectos convirtieron a la ciudad en la capital mundial del Modernismo. Incluye una lista de los 30 monumentos más recomendados entre los cuales, varios se ubican en Passeig de Gràcia el gran bulevar de Barcelona.

Los más emblemáticos son los que forman la llamada «Manzana de la Discordia» , muy próximos entre ellos: Casa Batlló, Casa Amatller y Casa Lleó Morera , situadas en los números 43, 41 y 35 respectivamente

Las dos primeras se pueden visitar y lo recomiendo sin lugar a dudas: ambas son maravillosas. La tercera está cerrada al público y sólo se accede en días especiales en los que abren sus puertas.

Otra joya modernista muy famosa es la Casa Milà conocida como La Pedrera (Passeig de Gràcia, 92). Es uno de los edificios más bellos de Gaudí y muy polémico durante su construcción. Hay varias opciones de visita incluyendo diferentes partes del edificio. La azotea no te la puedes perder, caminar entre «los guerreros» y las chimeneas del genial Gaudí, es una experiencia única.

TIP Viajero: Una vez en la azotea de La Pedrera, asómate al lateral que da al Passeig de Gràcia, la vista del paseo es espectacular. Si sigues caminando por el lateral llegarás a un punto con un pequeño arco dentro del cual queda enmarcada la Sagrada Familia. Es una instantánea única.

En realidad, los edificios modernistas reseñados junto a la ya mencionada Casa Fuster son los monumentos catalogados de Passeig de Gràcia. Otros edificios notables son La Unión y el Fenix (Passeig de Gràcia, 21) construido entre 1927 y 1931 por el arquitecto Eusebi Bona Puig y Frederic Marés.

En este edificio destaca su grandiosa cúpula ornamental adornada por el Ave Fénix en su parte superior. El Palau Malagrida (Passeig de Gràcia, 27), bello edificio modernista edificado entre 1905 y 1908 por el arquitecto Joaquím Codina, para el tabaquero Manuel Malagrida. La Casa Marfà (Passeig de Gràcia, 66) construido entre 1901 y 1905 por el arquitecto Manuel Comas, de estilo modernista y fachada gótica.

Shopping en Passeig de Gràcia

En relación con el capítulo compras, hay mapas comerciales con la ubicación de todas las tiendas. Algunas de ellas son las más lujosas de la ciudad, como la histórica marca Loewe ubicada en los bajos de la modernista Casa Lleó Morera de Domènech i Montaner. Una tienda muy solicitada por los turistas orientales.

Siguiendo los parámetros de ubicación explicados anteriormente, para situar la tienda Loewe no diremos Passeig de Gràcia, 35, que es su exacta localización. Diríamos «Passeig de Gràcia esquina Carrer Consell de Cent, lado montaña-Llobregat».

De hecho, en el elegante Passeig de Gràcia el gran bulevar de Barcelona, encontramos una larga lista de las marcas internacionales presentes en las mejores avenidas de las ciudades del mundo. Sus magníficos escaparates y su precios solo aptos para potentes bolsillos, son el sello común.

Elementos únicos en Passeig de Gràcia

Las farolas del Passeig de Gràcia no son cualquier cosa. Treinta y dos bancos-farolas distribuidos a lo largo del paseo, nos transportan a aquellos tiempos en los que la burguesía se paseaba con sombreros de copa. Pere Falqué, un arquitecto municipal, las diseñó con una base de trencadís, a modo de banco para sentarse con una farola de hierro forjado.

Otro elemento muy característico de los edificios modernistas ubicados en Passeig de Gràcia, es el trencadís. Una aplicación ornamental de fragmentos cerámicos que conforman un mosaico. En La Pedrera y Casa Batlló se aprecian tanto en la fachada como en las azoteas.

Ahora en lugar de mirar hacia arriba, observando a los edificios modernistas, vamos a mirar hacia abajo. Sí, al pavimento.

La llamada loseta de Gaudí fue creada por el genial arquitecto para pavimentar la Casa Batlló en 1904. Finalmente ha sido el pavimento utilizado en Passeig de Gràcia

Como todo lo de Gaudí, es super original. De forma hexagonal, con relieve y monocromática. Son las sombras y luces las que dan dinamismo al pavimento. Los motivos están inspirados en la naturaleza, muy habitual en su obra. Se necesitan siete baldosas juntas para poder contemplar en su totalidad los tres componentes que conforman el conjunto. Una genialidad más.

Dónde comer en Passeig de Gràcia

Finalmente no podía faltar en esta guía de Passeig de Gràcia el gran bulevar de Barcelona, el capítulo gastronómico. Cerca de Plaça Catalunya, en la parte baja del paseo se encuentra El Nacional (Passeig de Gràcia, 24). Un espacio compuesto de diversos restaurantes, cada uno de ellos especializado en un ámbito gastronómico. Con un interior modernista y una amplia oferta, este lugar con encanto es muy recomendable para unas tapas, almuerzo o cena.

El restaurante BLANC by Carme Ruscalleda ubicado en el hotel Mandarin Oriental (Passeig de Gràcia 38-40), uno de los más prestigiosos de la ciudad, es una opción asequible de la chef con 7 estrellas Michelin. El restaurante Galaxó ubicado en Casa Fuster ofrece una cocina mediterránea y vanguardista en un entorno elegante.

En el Passatge de la Concepció, un pasaje que une Passeig de Gràcia y Rambla Catalunya, cerca de la Diagonal hay una oferta interesante de restaurantes para todos los bolsillos. Destacan El Japonés y Mordisco del Grupo Tragaluz; el Petit Comitè y Boca Grande